En ACCIONA Energía sabemos lo que es desarrollar las grandes infraestructuras de energías renovables que están contribuyendo a descarbonizar el mundo. Y no todas ellas son parques eólicos o fotovoltaicos. También invertimos en otros proyectos sostenibles con un potencial de transformación inmenso; en términos tecnológicos y, sobre todo, humanos. Nos referimos a ASCEND, acrónimo de Acciona Solar Car ENgineered by Deakin, para el que hemos sellado una alianza con la Universidad Deakin en Australia, que se encuentra entre el 1% de las más importantes del mundo.
ASCEND es un coche impulsado íntegramente por energía solar que ha supuesto una oportunidad única para estimular un espíritu de innovación y sostenibilidad en una nueva generación de estudiantes de ingeniería. Más de mil alumnos han aunado sus conocimientos de aerodinámica, electromecánica, impresión 3D o computación para crear un vehículo destinado a hacer historia.
No obstante, el objetivo de ASCEND a corto plazo es conquistar una cifra: los 3000 kilómetros de la 2023 Bridgestone World Sollar Challenge que se celebra en las llanuras del outback australiano. Se trata de un prestigioso evento científico y deportivo en el que decenas de coches solares cruzan el desierto entre Darwin y Adelaida. Esos 3000 kilómetros representan mucho más que la distancia de una carrera: son una apuesta por las energías renovables, la movilidad sostenible y el futuro del planeta.
Te contamos cómo surgió el proyecto, quiénes están detrás y cómo hemos hecho realidad un vehículo que alumbra el camino para una nueva forma de vivir y de movernos.
Desde los años noventa, en los que ACCIONA lideró la primera revolución de las energías renovables, hasta principios del siglo XXI, cuando apostamos por el motosharing y la movilidad sostenible, una de nuestras principales aspiraciones estratégicas ha sido generar un impacto positivo en la sociedad.
ASCEND conjuga todas esas áreas y las conecta por medio de un denominador común a todos nuestros proyectos: la innovación, aunque esta vez impulsada por varias generaciones de alumnos de ingeniería australianos. Su proyecto ha sido construir desde cero un vehículo solar que integra baterías, paneles solares de alta eficiencia, impresión 3D con materiales sostenibles como la fibra de basalto y todos los sistemas de conducción de a bordo.
ASCEND de ACCIONA Energía es un coche solar que integra baterías, paneles solares orgánicos e impresión 3D con materiales sostenibles.
El acuerdo de ACCIONA Energía con la Universidad Deakin ha impulsado varias iniciativas en torno a las últimas tecnologías, tal como son los drones de inspección de aerogeneradores. Sin embargo, ASCEND es la joya de la corona. Iniciado en 2019, superó el parón del coronavirus, lo que obligó a trabajar en el coche de forma remota. Al final se han invertido cuatro años de trabajo y entusiasmo en total.
El compromiso de ACCIONA Energía con el proyecto trasciende el apoyo económico, ya que hemos brindado a los estudiantes la posibilidad de trabajar en proyectos del mundo real, les hemos ofrecido acceso a expertos de la industria y los hemos acompañado en todo su viaje. Por encima de todo, el apoyo de la compañía ha servido para inspirar una mentalidad innovadora en las nuevas generaciones de estudiantes de ingeniería. Ellos, junto con el profesorado que los ha guiado, son los verdaderos protagonistas de la gran aventura de ASCEND.
Entre los novecientos estudiantes implicados, la dedicación al proyecto se ha traducido en semanas, meses o incluso años, con algunos de ellos desarrollando su proyecto de fin de carrera en torno a él. Otros han pasado a trabajar de forma profesional como parte del equipo de ASCEND, que consta de veinte estudiantes y diez miembros de la universidad.
Uno de los “veteranos” es Angus McDonald, un estudiante de 25 años que ha estado presente desde los primeros diseños hasta las pruebas en carretera. Hoy es jefe de ingeniería mecánica y, entre otras cosas, ha sido el encargado de afrontar el desarrollo de la transmisión del coche. Él es uno de los estudiantes que han convertido ASCEND en su trabajo de fin de carrera y, además, participará en la competición en octubre.
Cuenta Angus que uno de los principales desafíos iniciales fueron los controladores del motor, es decir, la comunicación entre la fuente de energía y el motor. El equipo también tuvo que solventar problemas como el recalentamiento de las piezas o la falta de autonomía. Además, se llevaron a cabo muchas pruebas de dinámica de fluidos por ordenador para afinar la aerodinámica y aplicar análisis FEA al chasis antes de probarlo en carretera. “Lo que más me emociona es ver a los estudiantes llegando al taller cada día con nuevas ideas y formas de resolver los retos”, explica.
ASCEND ha sido fruto de un esfuerzo colectivo por parte de alumnos, profesores y ACCIONA Energía. Sin embargo, la responsabilidad de llevarlo hasta la meta en la Bridgestone World Solar Challenge recaerá sobre los pilotos. Uno de ellos es el propio Angus, que conoce el coche y sus características de primerísima mano. Él y el resto de su equipo están trabajando contrarreloj para poner el coche a punto, especialmente los equipos de a bordo. “Seguro que pasamos unas cuantas noches trabajando en el taller para poder competir al máximo nivel”, anticipa.
Angus es consciente de que calor será uno de los grandes retos a la hora de competir en el desierto. Por suerte, el vehículo cuenta con un sistema de ventilación para garantizar el bienestar del piloto en la cabina con aire procedente del exterior. Será un valioso apoyo, ya que la carrera se prolonga durante seis días.
Las cifras que maneja ASCEND también son una demostración de sus logros. El prototipo final mide cuatro metros y medio de largo por dos de ancho, con cinco metros cuadrados de placas solares. El vehículo incluye una batería de 60 kWh, diseñada para ofrecer una autonomía de entre unos mil quinientos y mil seiscientos kilómetros con una velocidad media de 75 km/hora, así como una velocidad punta de 130 km/hora. Estas cifras se consiguen gracias al uso de materiales ligeros como la fibra de carbono y unos neumáticos sostenibles de baja resistencia y menores emisiones de CO2 que los de un vehículo convencional.
En ACCIONA ya sabemos lo que es competir con coches de rally de forma sostenible. En 2012 desarrollamos el primer vehículo eléctrico de cero emisiones en completar el rally Dakar, hito que tuvo lugar en 2015. También competimos, de la mano de Laia Sanz y Carlos Sainz, con el equipo ACCIONA | SAINZ XE Team en varias ediciones de la carrera Extreme E 100% eléctrica. La World Solar Challenge es otro paso en la misma dirección, esta vez en el terreno de los coches solares. Se trata de la carrera más importante de su género en todo el mundo, y también la más antigua, ya que comenzó a celebrarse en 1987.
Las vastas llanuras desérticas del outback australiano se convierten cada año en el escenario de un reto que reúne a medio centenar de vehículos solares en distintas categorías ante una audiencia global de más de veinticinco millones de personas.
Por un lado, la categoría Challenger es la modalidad de velocidad pura, donde prima la aerodinámica y, en palabras, de McDonald, los coches son apenas unos paneles solares y un motor. En segundo lugar, la clase Cruiser acoge los vehículos concebidos como modelos de calle y con un posible futuro comercial, tal como es el caso de ASCEND. Por último, Adventure es una categoría no competitiva concebida para coches de ediciones anteriores o aquellos que no reúnen todos los requisitos.
Con independencia del resultado de la carrera, ASCEND ya es un proyecto laureado. Este coche solar ha demostrado su viabilidad en el mundo real, la colaboración de la industria y la universidad para resolver problemas y el potencial que tienen las mentes más jóvenes para transformar el mundo.
Tenemos la convicción de que este tipo de colaboración será clave para afrontar los desafíos globales de las próximas décadas. El proyecto ha permitido que los estudiantes trasladen su aprendizaje académico a un auténtico desafío industrial, lo que constituirá una gran experiencia a efectos de su futura carrera profesional, llevando el testigo de la sostenibilidad y la innovación dondequiera que vayan.
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